Carpaccio de buey: delicioso y fácil de preparar
¡Descubre cómo preparar un exquisito Carpaccio de buey!
¿Te gustaría sorprender a tus invitados con una entrada elegante y llena de sabor? El Carpaccio de buey es la opción perfecta. A continuación, te presentamos una receta fácil de preparar y con ingredientes accesibles. ¡No te la pierdas!
Ingredientes:
- 300 gramos de solomillo de buey
- Un puñado de rúcula fresca
- 50 gramos de queso parmesano rallado
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta al gusto
Modo de preparación:
1. En primer lugar, congela el solomillo de buey durante aproximadamente una hora. Esto facilitará su corte en finas láminas.
2. Luego, retira el solomillo del congelador y córtalo en láminas muy finas. Puedes ayudarte de un cuchillo bien afilado.
3. Coloca las láminas de solomillo en un plato grande y extiéndelas de manera uniforme.
4. Añade sal y pimienta al gusto sobre las láminas de buey.
5. Lava y seca la rúcula fresca, y colócala sobre las láminas de solomillo.
6. Espolvorea el queso parmesano rallado por encima.
7. Rocía un generoso chorrito de aceite de oliva virgen extra sobre el carpaccio.
8. Deja reposar durante unos minutos para que los sabores se mezclen.
Consejos útiles:
- Es importante utilizar un solomillo de buey de alta calidad y frescura para obtener los mejores resultados.
- Puedes acompañar el carpaccio con tostadas crujientes o pan recién horneado.
- Si lo deseas, puedes agregar unas gotas de jugo de limón para realzar el sabor.
- Recuerda que el carpaccio se sirve frío, por lo que es ideal prepararlo con antelación y refrigerarlo hasta el momento de servir.
Valor nutricional:
El Carpaccio de buey es una opción baja en calorías y rica en proteínas. Además, es una excelente fuente de hierro y vitaminas del grupo B.
Características de la receta:
- Tiempo de preparación: 10 minutos
- Tiempo de cocción: No requiere cocción
- Tipo de receta: Entrante
- Cantidad de porciones: 2 porciones
Datos interesantes:
El Carpaccio es una receta originaria de Italia, específicamente de la ciudad de Venecia. Fue creada en la década de 1950 por Giuseppe Cipriani, el dueño del famoso Harry’s Bar. Se dice que el nombre de esta preparación fue inspirado en el pintor italiano Vittore Carpaccio, conocido por utilizar colores vivos y brillantes en sus obras. Desde entonces, el Carpaccio se ha convertido en un clásico de la gastronomía italiana y ha ganado popularidad en todo el mundo.
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