Receta de conejo guisado con patatas: delicioso plato casero
¿Buscas una receta deliciosa y fácil de preparar para sorprender a tus seres queridos? ¡No busques más! Hoy te traemos una receta de conejo guisado con patatas que te dejará con ganas de repetir.
Ingredientes:
- 1 conejo troceado
- 4 patatas
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 1 pimiento verde
- 1 tomate maduro
- 1 vaso de vino blanco
- 1 vaso de agua
- Aceite de oliva
- Sal y pimienta al gusto
Modo de preparación paso a paso:
- Pelar y picar la cebolla, los ajos y el pimiento.
- Pelar y cortar las patatas en rodajas gruesas.
- En una olla grande, calentar un poco de aceite de oliva y dorar el conejo a fuego medio-alto. Retirar y reservar.
- En la misma olla, añadir un poco más de aceite y sofreír la cebolla, los ajos y el pimiento durante unos minutos hasta que estén tiernos.
- Añadir el tomate picado y cocinar durante unos minutos más.
- Incorporar el conejo a la olla y mezclar bien con las verduras.
- Agregar el vino blanco y dejar cocinar a fuego alto hasta que se evapore el alcohol.
- Añadir el agua, las patatas y salpimentar al gusto.
- Cocinar a fuego medio-bajo durante unos 40 minutos o hasta que el conejo y las patatas estén bien cocidos.
- Servir caliente y disfrutar.
Consejos útiles:
- Puedes añadir otras verduras de tu elección, como zanahorias o champiñones.
- Si prefieres un guiso más espeso, puedes añadir una cucharada de harina al sofrito de verduras.
- Para darle un toque más aromático, puedes añadir unas ramitas de tomillo o romero.
Valor nutricional:
Esta receta es una excelente fuente de proteínas y carbohidratos complejos gracias al conejo y las patatas. Además, es baja en grasas saturadas y alta en nutrientes esenciales como hierro y vitamina C.
Características de la receta:
- Tiempo de preparación: 15 minutos.
- Tiempo de cocción: 40 minutos.
- Tipo de receta: Plato principal.
- Cantidad de porciones: 4 personas.
Datos interesantes:
El conejo guisado es un plato tradicional en la gastronomía española, especialmente en las regiones de Castilla y León y Castilla-La Mancha. Se cree que su origen se remonta a la época medieval, cuando los conejos eran abundantes en la península ibérica y eran una fuente importante de alimento. Hoy en día, sigue siendo una receta popular en todo el país y se ha extendido a otros lugares del mundo como Argentina y México.