Deliciosos anillos de calamar rebozados en panko: receta fácil y rápida

¿Te encanta disfrutar de deliciosos platillos con mariscos? Si es así, no puedes perderte la receta de los anillos de calamar rebozados en panko. Este platillo es fácil de preparar y rápido de cocinar, lo que lo hace perfecto para cualquier ocasión.

Ingredientes:

• 1/2 kg de anillos de calamar
• 1 taza de harina de trigo
• 2 huevos
• 1 taza de panko
• Sal y pimienta al gusto
• Aceite para freír

Modo de preparación:

1. Lava los anillos de calamar y sécalos con papel absorbente.
2. En un recipiente, mezcla la harina de trigo con sal y pimienta.
3. En otro recipiente, bate los huevos.
4. Coloca el panko en un tercer recipiente.
5. Pasa los anillos de calamar por la harina, asegurándote de que queden cubiertos por completo.
6. Luego, sumerge los anillos de calamar en los huevos batidos y, por último, pásalos por el panko.
7. Calienta suficiente aceite en una sartén hasta que esté bien caliente.
8. Freír los anillos de calamar durante aproximadamente 2 minutos o hasta que estén dorados y crujientes.
9. Retira los anillos de calamar de la sartén y colócalos en papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
10. Sirve caliente y disfruta de este delicioso platillo.

Consejos útiles:

• Si no tienes panko, puedes utilizar pan rallado en su lugar.
• No sobrecargues la sartén con anillos de calamar, ya que esto puede disminuir la temperatura del aceite y hacer que los anillos no se cocinen adecuadamente.
• Si quieres hacer que tus anillos de calamar sean más picantes, puedes agregar un poco de pimentón al panko.

Valor nutricional:

Por porción de 100 g:

• Calorías: 200
• Proteínas: 24 g
• Carbohidratos: 20 g
• Grasas: 3 g
• Colesterol: 200 mg
• Sodio: 300 mg

Características de la receta:

• Tiempo de preparación: 15 minutos
• Tiempo de cocción: 2 minutos
• Tipo de receta: Entrante
• Cantidad de porciones: 4

Datos interesantes:

El calamar es un platillo muy popular en la cocina mediterránea y asiática. Se cree que su origen se remonta a la antigua Grecia, donde era considerado un manjar por su sabor y su textura suave.